¿Qué sabes de las azaleas?
Las azaleas son plantas caracterizadas por su belleza en el momento de la floración y los diversos colores en las que se pueden encontrar. Procedentes de Japón, son una especie con un alto nivel de cuidado pero que con perseverancia y los siguientes consejos no resultará difícil.
Hay que saber que las azaleas pertenecen a la familia de las ericáceas, al género de los rododendros. La diferencia con éstos es que las flores crecen en racimos y en las azaleas cada tallo posee una flor. Estas flores tan singulares se desarrollan al final del invierno o principios de la primavera.
La necesidad de riego abundante resulta primordial para esta especie y, además, de forma muy frecuente, sobre todo cuando se encuentran floreciendo. Se ha de evitar mojar los tallos, hojas y flores de la planta e incidir en la tierra debajo de ésta. Uno de los consejos más importantes sobre las azaleas es mantenerlas húmedas y para los meses de altas temperaturas, colocar un plato con agua debajo de la maceta ayuda a la superviviencia.
Mencionada la delicadeza de estas plantas, se ha de tener cuidado con la dureza del agua con la que se riega. El alto contenido en cal del agua del grifo puede paliarse añadiendo un poco de vinagre que contribuirá a disminuir el pH.
Además de la hidratación, las azaleas deben rodearse de un buen ambiente comenzando por la iluminación, que ha de ser indirecta, y la ventilación. Un área con sombra que ronde los 12 y 20ºC es el lugar ideal. Las temperaturas extremas no favorecen su desarrollo, si en invierno hace mucho frío es mejor introducirlas en casa y en entornos muy cálidos su floración se reduce.
Sobre la floración se ha de tener en cuenta que, al comprarlas, hay que elegir aquellas que posean unos capullos menos abiertos. Con el tiempo hay que cortar las flores envejecidas y cuando la planta deje de desarrollar nuevas flores se ha de podar y trasplantarla a una maceta de mayor tamaño. Con estos cuidados conseguiremos que nuestra azalea sobreviva y disfrutar de su belleza.