CÓMO DISTINGUIR LAS SEMILLAS DE CALIDAD
¿Sabes distinguir la calidad de las semillas que compras? Aquí en Agrojardín encontrarás semillas de gran calidad, pero puede ser muy interesante saber distinguirlas.
Las semillas ocupan un lugar de máxima importancia, puesto que son fundamentales en la conservación de la biodiversidad.
Para conseguir y mantener semillas de calidad, deberás fijarte en diferentes aspectos:
Aspectos para semillas de calidad:
Pureza
La pureza es muy importante para que la semilla sea de calidad. Por un lado, que las semillas estén enteras (sin roturas o fisuras), y sin enfermedades, con su embrión vivo y saludable. Por otro lado, que estén libres de restos de tierra, otras hojas, etc.
Tamaño de las semillas
También es una señal de calidad el hecho de que todas las semillas tengan un tamaño y una forma parecidas, de modo que si las observamos en grupo trasmita una imagen homogénea.
Prueba de germinación
Que germinen adecuadamente es una prueba definitiva de su calidad. Puedes hacer una prueba de germinación con algunas semillas de la bolsa, de modo que puedas observar un correcto desarrollo y crecimiento en unas condiciones adecuadas. Que crezcan correctamente en condiciones favorables indica su viabilidad, y su capacidad de crecimiento en condiciones desfavorables indica su vigor.
Unas semillas de alta calidad muchas veces pasan por este proceso de germinación en un laboratorio, desarrollándose en las condiciones óptimas como modo de comprobación de su viabilidad. Es cierto que fuera del laboratorio, las condiciones nunca son tan perfectas, por lo que siempre es un resultado aproximado.
Almacenamiento de las semillas
Disfrutar de unas semillas de calidad también requiere almacenarlas adecuadamente. Según el grado de humedad de la semilla, se conservará manteniendo o no un nivel de humedad. Si son ortodoxas (la mayoría lo son), las semillas secarán en la planta madre y perderán su humedad.
Estas semillas se pueden conservar durante largos periodos de tiempo sin que mueran al estar secas. En cambio, las recalcitrantes, no secan en la planta madre, por lo que tienen un alto grado de humedad que hay que conservar para que no mueran. Son menos longevas, pueden durar unas semanas o unos meses nada más. Suelen ser semillas de plantas tropicales o acuáticas.