Claves para proteger del frío a las plantas
Durante los meses de invierno, la actividad jardinera es mínima. La tarea fundamental en invierno es preservar nuestros jardines, flores y plantas del enemigo principal de este tiempo: el frío.
Veamos algunas de las labores que tenemos que llevar a cabo durante el invierno.
· Proteger del frío: si hay riesgo de helada, se recomienda regar las plantas para aumentar la inercia térmica. Si usamos fundas, mantas de hibernación, pantallas cortavientos u otro tipo de protecciones contra el viento y el frío, tenemos que comprobar que están cumpliendo su función.
· Plantar y trasplantar: aún estamos a tiempo de plantar especies de hoja caduca, sobre todo, si es a raíz desnuda, teniendo en cuenta que la tierra no debe estar helada ni saturada de agua.
· Podar: los arbustos no deben podarse en estas fechas; en todo caso, limpiarlos de ramas muertas, dañadas o deformadas. En cambio, sí se pueden podar los árboles frutales u ornamentales pues lo necesitan para que no pierdan savia, excepto si van a dar flor en febrero. Se recomienda cortar las vivaces que ya han concluido la floración.
· Mullir el suelo: el frío y la lluvia provocan el endurecimiento del sustrato en el jardín y los tiestos, sobre todo, si no está cubierto con mulching (o acolchado). Múllelo entonces con una azada o azadilla y acólchalo.
EL CÉSPED
Si tienes un jardín con césped, en diciembre y enero sólo debes pasar la segadora y regar el césped una vez al mes. Evita pisarlo si está helado o mojado. Para que la hierba no sufra quemaduras por efecto de la escarcha o la nieve dale un ligero riego. Si se forman charcos, intenta mejorar el drenaje de esa zona para impedir que surjan manchas de musgo o líquenes.