Cómo cuidar los abetos de Navidad para que después de las fiestas se puedan reciclar
El llamado árbol de Navidad, conocido como Abeto del Cáucaso o Abeto de Normandía (abeto de Nordmann), es un árbol perteneciente a la familia de las pináceas.
Lo primero a tener en cuenta a la hora de escoger un abeto para trasplantar pasadas las fiestas es elegir un buen ejemplar con ramas color verde intenso perfectamente enraizado en su contenedor.
Aunque en realidad los abetos son plantas de exterior, pueden sobrevivir pequeños periodos en el interior del hogar, por lo que podemos seguir usándolos con motivos navideños para decorar nuestra casa, sin miedo a que mueran, siempre y cuando los cuidemos bien.
Necesitan temperaturas frescas para desarrollarse bien, por lo que debemos mantenerlos el menor tiempo posible en el interior del hogar. Durante este tiempo debemos situarlos en un lugar alejado de las fuentes de calor, como radiadores, estufas o chimeneas. Siempre debemos elegir el lugar más fresco posible de la casa.
Respecto al riego, como dentro de la casa las temperaturas son altas, necesita un riego más frecuente que si estuviera situado en el exterior. Lo ideal es regarlo cada dos o tres días, cuando la tierra del contenedor esté próxima a regarse, aportando una cantidad suficiente de agua como para que no sólo la capa superficial de la tierra se moje, sino que ésta llegue a todas las raíces.
Hay que tener cuidado de no regar en exceso para que el agua no ensucie el suelo. Lo mejor es regar un poco, esperar que la tierra absorba bien el agua y luego volver a regar un poco más, para que se empape poco a poco y las raíces se humedezcan bien.
Es importante rociarlo con agua fresca para compensar la falta de humedad del ambiente y mantener la base del abeto con agua, para lo que disponemos de soportes especiales.
¿Qué hacer con el abeto después de Navidad?
Una vez pasadas las fechas navideñas puedes traernos el árbol para su reciclado a Agrojardín Garden Centre pero nunca debemos tirarlo.
Si disponemos de un gran jardín podemos replantarlo en nuestro jardín, aunque a la hora de la plantación de los abetos tras la Navidad, debemos de tener en cuenta la climatología y zona de donde nos encontramos. No es una buena idea plantar un abeto en un bosque cálido o en un jardín pequeño pues el ejemplar puede llegar a adquirir grandes dimensiones.