Claves para reconocer las plagas más comunes

Es fundamental tener un mínimo conocimiento de las plagas que pueden atacar a nuestras plantas, flores y jardines.Ser capaces de identificarlas cuanto antes garantiza mayores posibilidades de éxito en el control del ataque y el tratamiento. Veamos algunos aspectos de interés de las plagas existentes más frecuentes.

COCHINILLAS
Cómo son: tienen un escudo protector ceroso de color marrón, algodonoso o estriado blanco. Se suelen presentar en las partes menos visibles de las plantas, como las axilas, el envés o nervios foliares.
Cómo actúan: succionan la savia de las plantas, provocando un crecimiento más lento. Producen hojas dañadas, amarillentas y deformadas.
Los ambientes secos y cálidos y la falta de nutrientes favorecen su aparición.
Qué hacer: tratar cuanto antes y, si es posible, trasladar las plantas a un lugar más fresco y luminoso.
Cómo prevenir: revisar a menudo los tallos y el envés de las hojas.

PULGONES
Cómo son: son insectos muy pequeños de color verde, marrón o negro. Se instalan en los brotes tiernos y botones florales especialmente de las plantas de exterior. Se propagan a gran velocidad.
Cómo actúan: succionan la savia y deforman las hojas y las flores. Segregan una melaza que atrae a las hormigas y, además, favorece la aparición del hongo negrilla o fumagina.
El ambiente reseco y cálido, el uso excesivo de abono, el descuido en el riego y la presencia de malas hierbas, favorecen la aparición de los pulgones.

TRIPS
Cómo son: son insectos negros de entre uno y dos milímetros de largo, con forma de piojo; las ninfas son amarillas y muy activas.
Cómo actúan: punzan los tejidos para alimentarse, produciendo punteados o pequeñas manchas plateadas en las hojas y flores. Provocan el empalidecimiento, la deformación y la caída del follaje; propician el debilitamiento general de la planta.
Estas plagas se ven favorecidas por la sequedad, el calor.

ORUGAS Y LARVAS
Cómo son: las orugas son las larvas de los lepidópteros (mariposas). Las larvas nacen de los huevos de algunos insectos. Tienen forma de gusanos; sus colores y patrones les permiten mimetizarse con las plantas.
Cómo actúan: su boca está dotada de un poderoso aparato masticador con el que muerden, trituran y devoran las hojas de las plantas. Son bastante agresivas pues atacan a numerosas plantas del jardín, incluso pueden llegar a provocar la pérdida del ejemplar.

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